Es la pregunta que a cualquier persona que quiere hacerse autónomo le pasa por la cabeza antes de montar un negocio. ¿Cuánto cuesta hacerse autónomo? ¿Es realmente tan caro como dicen?
¿Cuánto cuesta darse de alta como autónomo?
Lo primero es inscribirse en el censo de empresarios de Hacienda y presentar el modelo Modelo TA.0521 en la Seguridad Social. Muchos piensan que tiene un precio o que está sujeto a tasas, pero no. Darse de alta como autónomo es 100% gratis. Aunque claro, hay pequeñas trampas como la necesidad de solicitar las bonificaciones en el momento de darse de alta como autónomo si quieres pagar menos cuota.
El coste fijo: La cuota de autónomo
La famosa y últimamente criticada cuota de autónomo cuesta 283,3 euros al mes (con la base mínima), salvo que vayas a recibir alguna bonificación como las que vas a ver en este artículo. Por lo tanto, ganes lo que ganes mes a mes, tendrás que pagar esta cuota. Estas son algunas bonificaciones:
Tarifa plana: 60 euros (12 primeros meses), 141,65 euros (13o al 18o mes) y 198,31 euros (19o al 24o mes). Mujer autónoma menor de 35 años (u hombre menor de 30): 186,25 € (13o al 18o o 20o mes).
Si te das de alta lo normal es que puedas acceder a la tarifa plana, por lo que puedes ir haciéndote a la idea de que como mínimo tendrás un gasto fijo de 1.189,86 euros durante el primer año y medio.
El coste variable: Los impuestos
Estos son los dos impuestos que persiguen al autónomo y convierten su facturación en unos ingresos mucho menores: IVA e IRPF.
Impuesto del Valor Añadido (IVA)
Es un impuesto que grava la venta de productos y servicios. El IVA es dinero que nunca debes considerar tuyo. Tú solo lo «recaudas». Cada tres meses tendrás que ingresarlo en Hacienda, restando previamente, eso sí, el IVA que te han ido cobrando a ti. Es muy sencillo. Son sumas y restas.
Existen diferentes tipos de IVA, pero lo más común es que tengas que tributar por el IVA general que es del 21%. Por lo tanto, la mayoría de ingresos y gastos que tengas incluirán IVA.
Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF)
También es una declaración trimestral y consiste en hacer pequeños adelantos del resultado de tu actividad a Hacienda, para no tenerlo que pagar todo de golpe al final. Es algo parecido a las retenciones de las nóminas mensuales de los trabajadores.
Tendrás que ingresar cada tres meses el 20% de los beneficios de tu negocio.
Otros gastos del autónomo
Asesoría/gestoría: Es un gasto fijo, ya que muy pocos autónomos llevan su propia contabilidad. Pero no debes considerar a un asesor como un pago mensual, sino como parte del negocio. Un asesor te mantendrá informado de ayudas, te ayudará a optimizar tu actividad y además evitará que cometas errores que cuestan dinero… Por ejemplo, en nuestra asesoría cobramos 30€ al mes.
Alquiler de local: Si quieres montar un negocio físico necesitarás un local y este gasto viene de la mano. Y, dependiendo de la ciudad y la zona, no es precisamente barato salvo que busques algún vivero de empresas local o un coworking.
Vehículo: Muchísimos autónomos son comerciales o repartidores, por lo que el vehículo entra dentro de su gasto habitual. Para deducir el coste del vehículo y la gasolina es necesario que este sea exclusivo para tu actividad, algo realmente complicado.
Telefonía e Internet: con el auge del teletrabajo y el aumento del número de personas que trabajan desde casa Internet y el teléfono se han convertido en un gasto fijo más para muchos. De nuevo, para deducirlos tendrán que ser de uso exclusivo empresarial.
En general, todos los gastos necesarios para obtener los ingresos, son deducibles, pero hay algunos que dan menos problemas (con Hacienda) que otros.